Aprovecha los Residuos de la Cocina para Hacer tu Propio Compostaje.

El compostaje es un proceso natural en el que los materiales orgánicos se descomponen y se convierten en un rico abono llamado compost. El compostaje puede realizarse tanto a pequeña escala en hogares y jardines como a gran escala en instalaciones municipales. Es una práctica sencilla y accesible que contribuye a la gestión sostenible de los residuos y al cuidado del medio ambiente.

Empezar un proyecto de compostaje en casa resulta tan entretenido como importante y complejo, el proceso de compostaje puede variar dependiendo de las condiciones específicas de tu ubicación y del tipo de compostador que utilices. Hay quienes utilizan recipientes grandes de lo más sofisticados, hay otros que utilizan estructuras un poco más improvisadas y digamos unos cuantos que simplemente acumulan en un rincón la materia orgánica que proviene del jardín y de la cocina. Cualquiera que sea tu manera de hacerlo es una actividad muy entretenida y gratificante cuando ves los resultados.

En nuestra cocina podemos restos de todo tipo como cáscaras de distintos vegetales y restos de comida ya preparada, esto puede traerte grandes beneficios, así como también grandes inconvenientes si no tomas en cuenta cuales desperdicios pueden acelerar la descomposición del material orgánico y cuales residuos pueden ralentizar el proceso, por ello, para optimizar tus resultados debes tomar en cuenta varios tips que hoy te queremos facilitar.

En primer lugar, recolecta los restos de la cocina, guarda los restos de frutas, verduras, cáscaras de huevo, posos de café, bolsitas de té, restos de pan, y otros alimentos no procesados en un contenedor en tu cocina. Evita agregar productos de origen animal, como carne o productos lácteos, ya que pueden atraer plagas y tardar más tiempo en descomponerse.

Puedes utilizar un compostador de jardín, un contenedor de compost o simplemente hacer una pila de compost en un área de tu jardín. Si usas cualquier compostador asegúrate de que el contenedor tenga orificios para permitir la ventilación y el drenaje.

Humedad: Es importante considerar que la compostera debe mantenerse húmeda, pero ten en cuenta que no debes generar un exceso de humedad, ya que no solo es una pila de materia orgánica muerta ¡Esto es todo un microecosistema vivo! Sí, existen una infinidad de organismos que intervienen en la degradación de toda esa materia en descomposición, los cuales son nuestros aliados porque son los obreros de toda esa estructura y están conformados por hongos, bacterias y hasta una infinidad de insectos y lombrices que no querrás aniquilar, por lo que vas a querer darles las mejores condiciones de trabajo aportándoles agua y sombra.

Mezcla y volteo: Cada pocas semanas, agita o voltea los materiales en el compostador. Esto ayuda a proporcionar oxígeno y acelera el proceso de descomposición. Si utilizas un compostador de tambor, simplemente gíralo varias veces.

Tiempo de descomposición: Dependiendo de las condiciones ambientales y del tamaño de los materiales, el compost puede tardar de varios meses a un año en estar listo. Sabrás que está listo cuando tenga un aspecto oscuro, terroso y fino, y no puedas identificar los materiales originales.

Usa tu compost: Una vez que el compost esté listo, puedes utilizarlo para enriquecer el suelo de tu jardín, macetas o jardineras. El compost es un excelente fertilizante orgánico que mejora la estructura del suelo y promueve el crecimiento de plantas saludables.¡Disfruta del proceso y ayuda a reducir los residuos orgánicos mientras creas un fertilizante natural para tus plantas!